Cine: histeria y personalidad histriónica
Grandes Esperanzas, la película de Alfonso Guarón sobre la novela de Dickens. Grandes esperanzas. 305 págs.,me lleva a pensar en los primeros capítulos de Anthony Giddens – La Transformacion de la Intimidad 124 pags sobre el llamado Amor Romántico:
Pero, sobretodo me lleva a pensar algunas cuestiones respecto a la histeria. Veamos que se dice por ahí. Para ver la película pinche en la foto.
El estilo de personalidad histérica puede pensarse como una sobre emocionalidad que tiene una cualidad de «como si» y un estilo cognitivo que es global y difuso. Este estilo sirve a la represión evitando la profundidad ya sea del pensamiento o del sentimiento que podría conducir a su resolución (Johnson, Estilos de carácter, Pág.161).
Etiología de un espectro: Entre la seducción delictiva y la atención del Padre.
La histeria pensada como un espectro continuo tendría en el extremo superior (de neurosis de carácter a estilo de carácter), un patrón de familia que incluye un padre seductor y la consecuente rivalidad entre la madre y la hija por la atención del padre. Este patrón de familia sería mucho más común que el incesto real e involucraría a más niñas que niños, al igual que el abuso sexual de contacto. La personalidad histriónica es el síndrome más identificable asociado con los temas edípicos clásicos (Johnson, Estilos de carácter, Pág.160).
Panorama delictivo en Chile: Un indicio
Un indicio numérico de la vivencia de niños y niñas lo constituyen en Chile los datos de la Fiscalía Nacional del Ministerio Público. En el 2013 ingresaron más de 24 mil casos de delitos sexuales, siendo un 74% de ellos correspondientes a menores de 18 años. De acuerdo a la Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (UNODC), organismo encargado de almacenar los datos de seguridad pública de los Estados. Chile ocupa el tercer puesto a nivel mundial en la tasa de denuncias por abuso sexual infantil cada 100 mil habitantes, con 68,5 casos en 2012 -fecha en que todos los países informaron los registros de sus policías-, siendo sólo superado por Suecia y Jamaica.
Escribiendo dentro del marco psicoanalítico, Marmont (1953) y más tarde Sperling (1973), argumentan que los temas pre-edípicos juegan un rol mucho mayor en la personalidad histérica de lo que se había reconocido anteriormente. Marmont sostiene que la sexualidad del histérico fue usada primariamente para obtener y sostener la atención del padre de sexo opuesto más que para lograr algún objetivo genital (Johnson, Estilos de carácter, Pág. 159).
Dentro de la posición psicoanalítica predominante sobre este enfoque de personalidad histriónica o histérica se encontrarían un buen número de expertos entre los que se cuentan: (Ver Blacker y Tupin,(1991); Easser y Lesser, (1965); Horowitz (1991; Kernberg, (1967); Lazare, (1971); Mueller y Aniskiewicz, (19869; Zetzel, (1968). Blacker y Tupin, (1991).
La cuestión afectiva en la Histeria.
«Retomando las relaciones reprimidas con la figura del padre la histérica todavía desea aquella figura masculina, libidinalmente excitante pero segura, que la va a cuidar y rescatar» (Johnson, Estilos de carácter, Pág. 172).
Cognición: «Ella puede actuar en forma bastante provocativa sexualmente ignorando cualquier pensamiento o sentimiento sexual. La histérica se destaca también por el desplazamiento de sentimientos o pensamientos desde un ambiente que pertenecen, pero que serían amenazantes, a un ambiente alternativo donde son menos amenazantes pero donde ellos realmente no pertenecen».(Johnson, Estilos de carácter, Pág. 173).
En el caso de las mujeres, la presencia del rasgo histérico a menudo implica que éstas no tienen relaciones cercanas con otras mujeres, pues “prefieren la compañía de los hombres” y a menudo, ven a las otras mujeres como aburridas, intelectualmente inferiores y/o hostiles y competitivas. (Johnson, Estilos de carácter, Pág. 175).
En caso de Laura, de la serie In Treatment, el pobre Paul Weston las vió dfícil, pero veamos que dice Johnson sobre la terapia:
«El terapeuta podrá ayudar a la histérica a aumentar su asociación, en oposición a la disociación entre pensamiento sentimiento y conducta. Podrá a su vez interpretar la conducta seductora, la cual está disociada de sentimientos o deseos sexuales. Alternativamente, el terapeuta puede ayudar a la cliente a hallar las palabras que corresponden a los sentimientos, particularmente aquellas que son abrumadoras y están disociadas de lo que las provoca. Es necesario también, aumentar la precisión de la autopercepción de la histérica. Ella esta inclinada a verse a sí misma en auto-representaciones polares como: ingenua, niña irresponsable o seductora maligna de la cual debiera estar avergonzada». (Johnson, Estilos de carácter, Pág. 178).
¿Qué opina usted?
El clásico de Freud.
volumen-ii-Estudios-sobre-la-histeria-1893-1895